La carretera N-631 en la provincia de Zamora será sometida a obras de rehabilitación del firme por un importe de 7,67 millones de euros. Los trabajos se ejecutarán entre el kilómetro 0 y el 56 de la N-631, una actuación que contribuirá a "la mejora de la seguridad vial, además de a la necesaria preservación del patrimonio viario", tal como se subraya desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), que ha formalizado ya el contrato. 

La N-631 es una es la carretera nacional que une la N-630 a la altura del embalse de Ricobayo con la N-525 en las cercanías de Rionegro del Puente.

El proyecto contempla la incorporación de técnicas sostenibles medioambientales, gracias a la reutilización parcial del material de reciclado procedente de las operaciones de fresado, además de la gestión de los residuos de construcción y demolición generados que, en su caso, no se puedan reusar en la obra, así como su adecuada limpieza y terminación.

Según la información facilitada desde el Ministerio, a través de la Subdelegación del Gobierno en Zamora, se fresará un espesor de tres centímetros en todo el ancho de ambos carriles. El resto del espesor de las capas bituminosas, 12 centímetros, se reciclará en frio. En las zonas en las que el espesor existente no permita un grosor de reciclado de 12 centímetros, se añadirán cinco centímetros de capa intermedia con mezcla bituminosa en caliente para completar el espesor mínimo.

Se completará la actuación con una capa de rodadura de seis centímetros de mezcla bituminosa en caliente con árido reciclado, en un porcentaje máximo del 25 %. Una vez ejecutada la capa de rodadura, se procederá al pintado de las marcas viales con pintura termoplástica en caliente y de dos componentes, así como la marca vial de borde de calzada con resaltos. 

Esta actuación se incluye dentro del programa de conservación y mantenimiento de la Red de Carreteras del Estado, donde Mitma ha invertido 60 millones de euros desde junio de 2018 en la provincia de Zamora.