El año 2022 ha sido "por fin" el del "impulso de los grandes proyectos" para la ciudad de Zamora. Así lo observa el alcalde zamorano, Francisco Guarido, quien afronta en 2023 su octavo año al frente del Ayuntamiento de la capital y el cuarto con mayoría absoluta.

"Ha sido un buen año", en palabras de Francisco Guarido a Europa Press. Un año en el que se iniciaron las obras para la construcción del nuevo Museo de Semana Santa, la ejecución del Conservatorio Profesional de Música, la realización de un centro cívico o la rehabilitación de los antiguos laboratorios para albergar el Museo Pedagógico. Mientras que la restauración del Mercado de Abastos y la renovación del edificio del Banco de España han sido lanzadas a la Plataforma de Contratación. 

A 2023 llega el regidor zamorano "desgastado" por el poder y con la incógnita sobre su presencia o no en las listas de las elecciones municipales de mayo.

 "Está todavía por ver; se han dado pasos positivos dentro de la organización, pero la decisión todavía hay que tomarla en un ámbito interno", comentó en su balance anual para Europa Press.

Los pasos positivos a los que se refiere Guarido se traducen en el acuerdo entre Izquierda Unida y Podemos en el ámbito autonómico para permitir a la asamblea zamorana que acuda sola y con sus propias siglas a los comicios.

"Es positivo y está claro que lo que se ha hecho en los últimos ocho años merece una continuidad, pero no sé si será conmigo o con otro compañero", ha apuntado.

El año 2022 ha sido también, para Guarido, el año de la apertura de una grieta más en el problema demográfico que sufre la capital. Por primera vez, Zamora ha bajado de los 60.000 habitantes en el censo, "una tragedia".

Las administraciones locales, dice, "poco pueden hacer" para frenar la sangría poblacional, ya que se requieren "políticas de Estado" que sirvan de verdad para "retener a las personas en la España Vaciada".

El reto demográfico es "consecuencia de un modelo económico capitalista que prima la despoblación en nuestras zonas y concentra a la gente en Madrid, el Mediterráneo y el norte de España". El resto del territorio, según Guarido, "se reserva ahora para poner placas solares y obtener materias primas".

El Ayuntamiento de Zamora ha trabajado en los últimos meses en una reordenación del tráfico en el centro de la ciudad para establecer la Zona de Bajas Emisiones a la que obliga Europa, con la realización de unas obras que han tenido por consecuencia la polémica por la eliminación de plazas de aparcamiento.

"Había que hacerlo en algún sitio y hemos apostado por el centro porque es el sitio que más tráfico soporta y en el que más emisiones se registraban; creo que, con el tiempo, será beneficioso para todos", entiende Guarido.

En 2023 confía Guarido en continuar los proyectos en marcha. "En enero van a empezar las obras, con fondos europeos, de la reforma de la plaza de la Puebla, la reordenación de la calle de Villalpando, la construcción de la pista de BMX, la renovación de los campos de fútbol del Ruta de la Plata, la nueva piscina en la Ciudad Deportiva o la nueva perrera". Trabajos a los que se sumarán otros importantes, como el parque de bomberos o el cuartel de la Policía Municipal.