La Diputación Provincial de Zamora ha adjudicado las obras de acondicionamiento y refuerzo del firme de la carretera ZA-P-2436 en el tramo que comunica Pedroso de la Carballeda y Linarejos, con un presupuesto de algo más de 600.000 euros.

El vicepresicente primero y diputado de Carreteras, José María Barrios, explica que este tramo es continuación del recientemente ejecutado y en servicio desde hace meses desde Sagallos a Pedroso de la Carballeda, con una longintud de 9,5 kilómetros, que contó con una inversión algo superior a los 900.000 euros.

La Diputación ha destinado así más de 1,5 millones de euros este mandato a la  carretera ZA-P-2436, que discurre íntegramente por localidades que pertenecen al Ayuntamiento de Manzanal de Arriba.

A la conclusión de este segundo tramo, la ZA-P-2436 enlazará con el Camino del Lobo que discurre entre Villarino de Manzanas y Robledo de Sanabria, pasando por Linarejos, con un trazado de 23 kilómetros que discurre por plena Sierra de La Culebra, cuyo proyecto de mejora se encuentra actualmente en fase de redacción y a punto de concluir, según se explica desde la administración provincial.

Las obras de esta última actuación se inician en el final de tramo urbano de Pedroso de la Carballeda y finaliza al inicio de la travesía de Linarejos.

La longitud total del tramo es de 2.577 metros, que actualmente cuentan con una anchura pavimentada que varía entre los 4,30 a 5,40 metros, "formada por riegos asfálticos sobre una base que presenta diversas patologías".

Desde el Área de Obras de la Diputación se destaca la conveniencia de actuar en este tramo, tras haber sido bacheado en diferentes ocasiones y encontrarse "deteriorado", "circunstancias que impiden una circulación cómoda y segura a los habitantes de la zona y a los visitantes".

Con la actuación se pretende obtener una sección de 5,5 metros de anchura pavimentada, con arcenes de 0,25 metros en cada una de las márgenes, para disponer de una anchura total de plataforma de seis metros.

Para ello se realizará un cajeado de la berma o ensanche a ambos lados de la calzada para colocar una capa de hormigón en masa de 20 centímetros de espesor y conseguir de esta forma la ampliación necesaria.

Posteriormente, se colocará una lámina de geotextil antifisura en la junta longitudinal generada, para seguidamente extender dos capas de mezcla bituminosa de 4 centímetros cada una.

Finalmente, se procederá a la limpieza y desbroce de las cunetas y de los pasos salvacunetas en caminos y accesos de todo el tramo con motoniveladora. También está previsto cambiar la red de drenaje transversal con obras nuevas que eliminarán las existentes, "que están hundidas y deterioradas".