El nuevo censo del lobo ibérico en Castilla y León elaborado por el área de Medio Ambiente revela un "aumento sustancial" de las manadas de la especie, en palabras del consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones. El responsable de Medio Ambiente ha acusado en Zamora al Gobierno central de remitir a la Comisión Europea información "errónea" asegurando que la población está en "regresión".

Durante su visita a las Lagunas de Villafáfila, el consejero aseguró que, en contra de lo que sostiene el Gobierno de España, está "comprobado y probado", subrayó en declaraciones recogidas por la agencia EFE, que la especie experimenta una amplia expansión en las cuatro Comunidades Autónomas que albergan más del 95% de la población de lobos en España, esto es, Castilla y León, Galicia, Asturias y Cantabria.

Estas cuatro comunidades han encargado estudios de la evolución de la especie en sus territorios y, tras conocerse los datos del de Galicia, Suárez-Quiñones adelantó que el estudio de Castilla y León, a punto de terminarse, pone de relieve un "crecimiento constante" de ejemplares del lobo respecto al censo elaborado en los años 2011-2012.

"No haría falta ni hacer inventario" porque resulta "una verdad notoria que tendría que estar exceptuada de prueba" el incremento "notabilísimo" de la población del lobo en Castilla y León, se expresó el consejero el jueves, a preguntas de los periodistas, durante la visita a Villafáfila con motivo del Día Mundial de los Humadales.

Tal aumento, subrayó, lo constatan los ganaderos y alcaldes de las zonas que conviven habitualmente con el lobo, por lo calificó de "información errónea" los datos aportados por el Gobierno de España en el catálogo de la especie para que fuera incluido en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y prohibir así su caza recreativa al norte del Duero.

Según el consejero, se ha "hurtado" a las Comunidades Autónomas la gestión del lobo, lo que ha ido "en perjuicio de la ganadería extensiva, del desarrollo rural y de la vida de nuestros pueblos", ha advertido.

Respecto a la carta remitida este miércoles a la Comisión Europea por doce países, entre ellos España, para mantener la protección del lobo, Suárez-Quiñones hizo hincapié en que hay otros quince países europeos que no han rubricado la misiva.

La carta responde, en opinión del consejero, a que el Gobierno central busca apoyos donde puede para "tratar de blanquear esta acción contra el medio rural y la ganadería extensiva" y lo hace, según expuso, recabando adhesiones en territorios que no tienen el problema del lobo.

Defendió Suárez-Quiñones un "equilibrio" entre la conservación del lobo y la ganadería extensiva, al tiempo que acusó al Gobierno de España de "hacer el caldo gordo" en esta materia a asociaciones conservacionistas "minoritarias y radicales".