De Argentina y Cuba, a Lubián, El Puente, Puebla de Sanabria y Toro. Son estas cuatro últimas localidades las que acogen a los ocho primeros participantes del "Reto Zamora", que llegaron ayer a España junto con sus familias y a los que hoy ha dado la bienvenida la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco.

En este primer grupo se ha recibido a 16 personas procedentes de Argentina y Cuba, seis mujeres y dos hombres junto con sus familiares, entre ellos cinco menores de 12 años.

Son profesionales de la medicina, enfermería, educación y contabilidad, entre otras disciplinas, que van a iniciar una nueva andadura laboral y vital en Castilla y León, "aportando vida y ganas de trabajar en los pueblos", y a quienes la consejera ha agradecido su apuesta por Zamora.

El "Reto Zamora" es un proyecto puesto en marcha por la Junta de Castilla y León para atraer y arraigar en esta provincia a personas interesadas en trabajar en el ámbito de los servicios sociales y a sus familias.

Los participantes son personas nacidas y residentes en Cuba, Argentina y México, con nacionalidad española y preferentemente descendientes de emigrantes zamoranos, aunque también pueden participar descendientes de emigrantes de otras provincias de la Comunidad.

La Junta destaca el programa como una apuesta contra la despoblación. El fortalecimiento de los servicios sociales de Castilla y León, particularmente el desarrollo del nuevo modelo de atención centrado en la persona en los núcleos rurales, requiere la contratación de trabajadores cualificados en los cuidados de larga duración.

Así, el objetivo del "Reto Zamora" es garantizar la prestación y calidad de los cuidados de larga duración en los núcleos rurales zamoranos, pero, también, contribuir a revertir el proceso de envejecimiento y caída de población que sufren muchos municipios.

El programa facilita a las personas seleccionadas la obtención, en origen y en España, de la adecuada formación para el puesto de trabajo. Además, cubre los gastos del traslado a España del trabajador y sus familias y provee una solución habitacional en la provincia de Zamora, asumiendo la Junta de Castilla y León los costes durante los tres primeros meses más la fianza de la vivienda.

Para este grupo, concretamente, se han dispuesto siete viviendas, ya que dos participantes son hermanas y vivirán juntas. También se proveen los apoyos que faciliten la integración plena de la persona seleccionada y sus familias en la tierra de sus antepasados.

Para el desarrollo del proyecto, que cuenta con una financiación de 500.000 euros, además de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, impulsora del proyecto, participan las consejerías de Educación y Sanidad, los ayuntamientos del medio rural de la provincia de Zamora y entidades del Tercer Sector, en particular Fundación Intras, responsable del traslado de las personas seleccionadas desde Cuba, Argentina y México, de su formación e inserción laboral, así como de la gestión de las candidaturas y arraigo en la provincia de Zamora.

Isabel Blanco ha destacado la colaboración con las casas de Castilla y León en Cuba, Argentina y México, especialmente en el proceso de incorporación de los posibles participantes en el proyecto.

También ha informado de que, a este primer grupo de participantes en el programa se sumarán, en los próximos meses, otros candidatos seleccionados y sus familias, hasta completar el número de personas participantes previstas, que es de una quincena de familias. Posteriormente, en función de la evaluación de sus resultados e impacto, se abordará su posible continuidad en el tiempo y su extensión a otras provincias de la Comunidad.

En el nuevo modelo de atención centrado en la persona, el papel de los profesionales es esencial. Se calcula que por cada 100 personas atendidas se crean 64 empleos a jornada completa más 12 trabajos para centros especiales de empleo asociados a tareas de cuidados de proximidad, según la información de la Consejería de Familia.

Para abordar la cobertura de estos empleos, se ha constatado la "conveniencia" de atraer población de otros territorios como un elemento estratégico para reforzar los cuidados de larga duración. De ahí "la importancia de este pilotaje", que garantiza a la persona seleccionada un contrato de trabajo con una duración mínima de un año con Fundación Intras como trabajadores cualificados en los cuidados de larga duración a personas mayores, con discapacidad y dependientes dentro del proyecto de "Atención en Red".

Se trata, por tanto, de una nueva forma de abordar la atención a las personas que lo necesitan combinando los cuidados en el domicilio y en centros residenciales. En cuanto a la parte domiciliaria, se plantea como una alternativa a la atención en centros residenciales, creando "hogares seguros" para aquellas personas que, aunque necesiten apoyos, quieren seguir viviendo en su hogar, ya sea en una vivienda de su propiedad, con el programa "A gusto en casa" o en una adaptada de las que ceden los ayuntamientos, que las gestionan en régimen de propiedad o de alquiler a través del programa "Viviendas en Red".

El programa incluye el acceso a viviendas públicas en régimen de alquiler social a los profesionales que trabajan en él, fomentando así que se instalen con sus familias en los municipios en los que prestan sus apoyos a las personas vulnerables, ayudando a fijar la población en el medio rural.