El nuevo Museo de Semana Santa de Zamora se retrasa y su apertura no será posible al menos hasta el año 2026, tras la renuncia de la adjudicataria de las obras del recinto museístico, tan solo medio año después de iniciarse los trabajos. Además, el presupuesto se incrementará en un millón de euros.

La situación generada en torno a las obras del museo tras la aparición de restos arqueológicos ha motivado hoy en la capital zamorana una reunión entre la directora general de Vivienda de la Junta de Castilla y León, María Pardo, y representantes de las otras administraciones que cofinancian el proyecto, Ayuntamiento de Zamora y Diputación de Zamora, y de la Junta Pro Semana Santa de Zamora. Todos han respaldado la decisión de resolver el contrato de mutuo acuerdo para proceder lo antes posible a una nueva licitación, como recoge EFE.

La renuncia de la Unión Temporal de Empresas (UTE) adjudicataria, compuesta por Cyopsa, Sisocia y Exfamex, ha sido aceptada por la Junta de Castilla y León como contratista para resolver el contrato de forma amistosa y sin penalización para la UTE, con la idea de evitar así una mayor demora en los plazos de construcción, según se ha argumentado este lunes a los periodistas.

Abierto al público desde 1964, el Museo de Semana Santa de Zamora, decano en España, cerró sus puertas el pasado septiembre para su demolición de cara a la construcción de uno más amplio que ocupará 5.370 metros cuadrados en tres plantas para albergar 37 pasos, trajes procesionales y enseres de las cofradías.

El coste de la obra, que inicialmente se adjudicó por 7,7 millones de euros, aumentará entre el 15% y el 20%, precisó Pardo. Un incremento que se justifica tanto por el aumento del precio de los materiales desde la licitación del pasado año, como por los cambios en el proyecto a consecuencia de los restos arqueológico encontrados en el solar del futuro museo.

María Pardo defiende que la resolución del contrato se haga de mutuo acuerdo al no caber la posibilidad de sancionar a la empresa por incumplimiento de plazos, ya que la parte de los trabajos ejecutada hasta ahora, consistente en el derribo del antiguo museo, el acondicionamiento del terreno y las catas arqueológicas, se ha realizado en plazo y ya está certificada.

De esta forma se agilizará la nueva contratación de las obras, que si no podría prolongarse durante al menos un año, según las explicaciones de la directora general de Vivienda de la Junta.

La presidenta de la Junta Pro Semana Santa de Zamora, Isabel García, mostró su deseo de que el nuevo museo pueda estar listo para la celebración de la Semana Santa del año 2026, detallando también que el sobrecoste podría rondar el millón de euros.

"Si es en la Semana Santa de 2026, bendito sea", se expresó Isabel García al ser preguntada por los periodistas por los plazos.

La presidenta de la Junta Pro Semana Santa calificó de "gran contratiempo" el tener que contratar de nuevo las obras, si bien agradeció la "buena disposición" de todas las administraciones implicadas.

Ahora se deberá proceder formalmente a la resolución del contrato y se deberá redactar uno nuevo para las obras que faltan. Las administraciones que financian los trabajos deberán habilitar las nuevas partidas presupuestarias y se deberán licitar de nuevo las obras antes de que las máquinas puedan volver a trabajar en el solar del antiguo museo, informa EFE.