En el autobús siniestrado viajaban 40 personas y se dirigían a Roquetas de Mar, habiéndose producido el accidente en Cabeza de Torres, en Murcia
Reconoce haber abusado sexualmente de su sobrina durante una comunión y acepta dos años de prisión
La madre de la víctima ha empujado e insultado al varón antes de entrar al juzgado.
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Baleares ha condenado a un hombre a dos años de prisión por abusar sexualmente de su sobrina durante la celebración de una comunión. El varón no tendrá que ingresar en prisión si no comete ningún delito durante un periodo de tres años y completa un curso de educación sexual.
El hombre ha aceptado los hechos tras alcanzar un acuerdo con el Ministerio Fiscal en la vista celebrada este lunes. También se le ha impuesto una multa de 6.000 euros, que deberá abonar en el plazo máximo de un año, la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 500 metros durante un periodo de siete años y la libertad vigilada durante seis años.
Antes de la celebración de la vista, la madre de la víctima ha empujado e insultado al varón a las puertas de la Audiencia. "Le has jodido la vida a tu sobrina", le ha espetado la mujer, que también ha protestado contra el funcionamiento de la Justicia. Varios testigos han intervenido para impedir la agresión.
Los hechos
Los hechos ocurrieron el 17 de mayo de 2014, durante la fiesta de celebración de la comunión de su sobrina en un hotel en Cala Mandía.
El condenado ha reconocido que, aprovechándose de que su sobrina, de entonces ocho años, tenía que ponerse el bikini para bañarse en la piscina, la acompañó a la habitación.
Una vez dentro, el hombre le dijo que debía ducharse, a lo que la pequeña accedió. Aprovechándose de esta situación, el condenado abrió la cortina de la bañera y abusó sexualmente de la menor.
Escribió que "estadísticamente es mucho más probable que un sacerdote cometa un delito de agresión sexual contra menores de edad que delinca una persona migrante"
Localizados por la alerta automática enviada desde el móvil de uno de los ocupantes, todos de Madrid, tras el impacto
No precisaban ayuda médica, pero sí para poder avanzar, ya que la nieve les impedía continuar