Sanidad de la Junta de Castilla y León ha vuelto a declarar como no apta para consumo humano el agua del grifo en Toro por el nivel de arsénico, escasos tres días después de que el Ayuntamiento levantase una segunda prohibición.

La delegada territorial, Leticia García, ha querido "dejar claro" que es la Junta de Castilla y León "la garante de la seguridad del agua de consumo y seguirá velando por la salubridad del agua Toro".

Explica García Sánchez que "los valores que ofrece el Ayuntamiento de Toro distan mucho de los resultados obtenidos por la Junta en el laboratorio acreditado, y los niveles detectados por el laboratorio de la Junta superan con creces el límite de salubridad permitido".

El alcalde del municipio, Tomás del Bien, ha emitido un Bando declarando el agua no apta para el consumo, en el que explica que durante el día de hoy se personó en las oficinas de Toro la inspectora de Sanidad "levantando acta declarando el agua del abastecimiento de Toro como no apta para el consumo, por no cumplir con el valor paramétrico especificado", siendo el índice de arsénico analizado de 10,2 microgramos por litro, cuando el máximo permitido es de 10.

Tras casi un mes sin poderse beber agua del grifo, el Ayuntamiento levantaba la prohibición esta misma semana, el martes pasado, comunicando en un Bando que se había registrado un parámetro de 7,8 microgramos por litro, por debajo de los límites legalmente establecidos.

La propia Leticia García aclara que la Junta no es competente en el abastecimiento del agua en Toro y que las muestras periódicas que viene realizando forman parte del protocolo. "Cuando se detecta un nivel perjudicial para la salud debe analizarse periódicamente y de acuerdo a la normativa". Las muestras son "analizadas en el laboratorio acreditado, como se hace en toda la Comunidad autónoma".

Queja de los concejales del PP ante el Procurador del Común

La polémica por el agua en Toro ha llevado a la oposición del Partido Popular a presentar una queja ante el Procurador del Común, después de que sigan a la espera de los informes y análisis sobre la calidad del agua solicitados hace un mes.

La oposición exige a Tomás del Bien "transparencia tras meses de ocultación de información sobre la crisis del arsénico", al tiempo que denuncia "la dejadez y falta de previsión del alcalde, que conoce al menos desde finales del año 2021 la existencia de altos niveles de arsénico en el agua y no ha hecho nada para dar soluciones a este gravísimo problema", critican los concejales Alejandro González, María de la Calle y Raúl Martínez.

Los ediles populares han vuelto a exigir la convocatoria de un Pleno Extraordinario, ya que "el alcalde no contestó ninguna pregunta de las formuladas por la oposición en el Pleno ordinario de enero".

"Ante la falta de información y explicaciones no nos sorprende que muchos toresanos piensen que el Equipo de Gobierno socialista está jugando con su salud", exponen. "La gestión del Alcalde entre el bando de fecha 7/12/2022, con niéveles de arsénico de 11,7 y el segundo Bando de Alcaldía que recoge el resultado de fecha 21/12/2022 que recoge un resultado de 11.9, roza la conducta delictiva".

Para los concejales del PP "ha quedado demostrado que los análisis realizados por el Ayuntamiento de Toro carecen de toda credibilidad".