Tarde de Santo Entierro en Zamora con el Barandales y sus pesados esquilones abriendo la procesión, como siempre desde el inicio del desfile que organiza la Real Cofradía del Santo Entierro, creada en 1593.

El buen tiempo y la ausencia de restricciones de años atrás por el covid-19 ha propiciado la aglomeración de gente, principalmente en las calles del Casco Antiguo por las que ha discurrido la procesión del Santo Entierro.

Es la procesión oficial de la Semana Santa zamorana, en la que participan las autoridades civiles, militares y eclesiásticas de la provincia, y en la que los pasos llevan escolta y faldones de negro luto, el color de la túnica de terciopelo que visten los hermanos y hermanas, alrededor de 3.400.

Recorrido

En la plaza de Viriato, a las 16:00 horas, se realiza el acto público del Sermón del Descendimiento. Todo público y hermano de la cofradía que quiera asistir al acto debe acceder a la plaza de Viriato por la calle Ramos Carrión o por la Rúa de los Francos, ya que el resto de calles (Damas, Hospital, Barandales y Sacramento) estarán cortadas por motivos de organización del desfile procesional.

Salida de la plaza de Santa María la Nueva a las 16.30 horas para continuar por la calle del Corral Pintado, calle Reina, plaza de Juan Nicasio Gallego, Plaza Mayor (por el lado del Ayuntamiento), calle Mariano Benlliure, plaza del Fresco, calle de San Vicente, calle del Riego, San Torcuato, calle Santiago, plaza de Santiago, Santa Clara, Sagasta, Renova, Plaza Mayor (por el lado del Cuartel de la Policía Municipal de Zamora, Ayuntamiento Viejo), Ramos Carrión, plaza de Viriato (por el lado del Parador), Rúa de los Francos, Rúa de los Notarios, plaza de los Ciento, Rúa de los Notarios, plaza de la Catedral, donde se realizará el relevo de Unidades de Caballería de la Policía Nacional y de la Guardia Civil. 

El retorno, por la Plaza de la Catedral, Rúa de los Notarios, plaza de los Ciento, Rúa de los Notarios, calle Sor Dositea Andrés, calle Damas, plaza de Viriato (por el lado de las Arcadas), para finalizar en la plaza de Claudio Moyano y entrada en la carpa habilitada.

Historia

La Cofradía del Santo Entierro es la única de la Semana Santa que tuvo un origen gremial, hasta el punto de que el gremio de sederos exigía un examen de oficio para entrar en ella hasta 1626, según se relata en la web de la cofradía.

En el siglo XVII, la crisis de la industria textil sedera afectó a una cofradía que se vio obligada a emprender reformas que llevaron a permitir la entrada a todo tipo de cofrades, si bien los sederos siguieron con un papel importante.

Se produce así un aumento de miembros, ingresos e imágenes, como se anota en la página de la Junta Pro Semana Santa, que no la libraron de alguna crisis posterior, hasta que en el siglo XIX vive un esplendor que le lleva a sustituir los viejos pasos por otros nuevos.

Así, adquiere un importante patrimonio escultórico, también durante el siglo pasado, con obras de Ramón Álvarez y Mariano Benlliure, entre otros. En 1925 el rey Alfonso XIII le concede el título de Real a la cofradía.

La Magdalena es la primera imagen en aparecer en escena. Le siguen los pasos de La Conversión del Centurión, La Lanzada, Santísimo Cristo de las Injurias, El Descendimiento, La Piedad, El Descendido, La Conducción al Sepulcro, San Juan y Nuestra Señora, El Retorno del Sepulcro, Santo Entierro (La Urna), y la Virgen de los Clavos.