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Teniente coronel Moreno: "El Regimiento Farnesio ha transformado 800 civiles ucranianos en nuevos soldados"

Durante seis meses, 131 militares del Regimiento vallisoletano han participado en la misión EUMAM para instruir a ucranianos antes de que partan al frente

Teniente coronel Moreno: "El Regimiento Farnesio ha transformado 800 civiles ucranianos en nuevos soldados"
El teniente coronel Roberto Moreno, jefe de la unidad de formación de combate en la Operación de la Misión Europea de Asistencia Militar a Ucrania. TRIBUNA
José Ángel Gallego Vázquez
José Ángel Gallego Vázquez
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Han estado seis meses lejos de sus casas, concretamente en la Academia de Infantería de Toledo. Allí tenían una misión clara: convertir a civiles ucranianos, muchos ellos voluntarios, en auténticos soldados para defender a su país en el conflicto con Rusia. Al mando de la operación, el teniente coronel Roberto Moreno, jefe de la unidad de formación de combate en la Operación de la Misión Europea de Asistencia Militar a Uctania (EUMAM UA). Recibe a Tribuna GRUPO en Toledo, después de que las cámaras de este periódico puedan filmar cómo es la instrucción de los militares vallisoletanos del Regimiento Farnesio 12 a los nuevos soldados ucranianos. Califica de "éxito" la operación donde han participado 131 efectivos del Regimiento que "ha transformado a 800 civiles ucranianos en nuevos soldados". 

PREGUNTA. ¿Qué es la operación EUMAM UA?
RESPUESTA. La unidad de formación de combate que está aquí en Toledo forma parte de la Operación EUMAM, que es la misión de la Unión Europea de formación de asistencia militar a Ucrania. Es una misión de la UE y engloba los esfuerzos de esta organización para prestar asistencia militar en el ámbito de la formación a Ucrania desde que empezó la guerra. A nivel nacional, España forma parte de esta operación desde un principio y materializa el firme compromiso de nuestro país en apoyo a un aliado.

P. ¿Cuál es el papel del Regimiento Farnesio en esta operación?
R. El Regimiento de Caballería Farnesio, con sede en Valladolid, recibe el cometido de constituir tanto el cuartel general que está en Burgos, como la unidad de formación de combate que está en Toledo. Desde entonces 131 jinetes de nuestro regimiento desplegamos en la Academia de Infantería de Toledo desde el mes de mayo para participar en esta operación hasta finales de noviembre, que seremos relevados. Hemos instruido casi 800 militares ucranianos, proporcionándoles la formación básica y sanitaria de combate, transformando 800 civiles en nuevos soldados.

P. En líneas generales ¿Qué balance hace de esta operación?
R. El balance es absolutamente positivo. Lo más importante es que estamos proporcionando ese apoyo y asistencia a un aliado que se encuentra ahora mismo en combate. Un combate generalizado, muy duro, y que nos pilla muy cerca, a las puertas de Europa. Nosotros lo estamos viviendo de forma muy intensa, con meses de muchísimas horas de instrucción. El balance es muy bueno, tanto en la parte militar como en la parte humana para todos los componentes de la operación.

P. ¿Con qué sensación se van los ya nuevos soldados ucranianos? ¿Qué les cuentan? ¿Cómo está siendo la experiencia?
R. Después de estar cinco semanas con nosotros parten para Ucrania para ser encuadrados en unidades de combate. La mayoría son destinados al frente para combatir y defender a su país. Ellos se muestran tremendamente agradecidos a España y a sus instructores. En esas semanas que pasan aquí se forjan unos lazos de compañerismo muy intensos. Cuando se van lo único que muestran es un agradecimiento absoluto.

Tenemos empresarios, tractoristas, maestros, incluso vagabundos y expresidiarios, pero aquí son soldados con motivación altísima

P. ¿Es más difícil la instrucción a civiles sin conocimientos militares? Es decir, coger a gente de la calle y convertirlos en soldados en apenas cinco semanas.
R. En el fondo es un cometido más. La labor de asistencial militar y de enseñanza siempre la hemos tenido y al final no deja de ser como en nuestros centros de formación de tropa. La peculiaridad es que sabemos que esta gente cuando acabe su periodo de formación van directamente al frente y al combate. Eso es algo muy exigente. Ellos lo asumen con una motivación altísima, una voluntariedad tremenda y te das cuenta que vienen de una vida civil hace tan solo unas pocas semanas, con una vida muy parecida a la nuestra. De un día para otro se ven aquí en Toledo recibiendo esta formación antes de ir al frente. Yo creo que la milicia sabe igualar perfectamente con su disciplina a este grupo tan heterogéneo de gente. Tenemos empresarios, tractoristas, maestros, incluso vagabundos y expresidiarios y aquí son soldados con unas ganas y motivación altísimas.

P. Los soldados y mandos del Regimiento Farnesio coinciden al señalar que esta misión les está llenando ¿Por qué cree que sucede esto?
R. Creo que va un poco relacionado con el carácter español. Esa cercanía, esa empatía, ese compañerism... nuestros soldados son el mayor exponente de todas las virtudes del Ejército. En tan poco tiempo han establecido lazos tan profundos y ven a los soldados ucranianos como auténticos camaradas, es el compañerismo en estado más puro. Cuando les despedimos se echan a llorar y se abrazan a sus instructores. Nuestros soldados se quedan con esas caras de preocupación. Es la parte más humana de la operación, es una experiencia militar, pero también humana.

P. ¿Por qué se está desarrollando esta misión en Toledo?
R. Al principio de la operación se decidió llevar a cabo esta formación en Toledo porque ofrecía unas condiciones inmejorables. El campo de maniobras que tenemos junto a la Academia de Infantería ofrece unas instalaciones excepcionales para llevar a cabo la instrucción. Tiene zonas de polígono de combate en zonas urbanas, tiene trincheras, campos de tiro... en definitiva, muchísimas posibilidades. Hay pocos sitios en España que nos brinden esas oportunidades. Y por cierto, la acogida y la hospitalidad en esta Academia de Infantería han sido espectaculares desde que comenzamos la operación. Es muy fácil estar aquí desplegados.

P. ¿Cómo está viendo desde la lejanía el conflicto de Ucrania y Rusia?
R. Hacemos un seguimiento continuo del conflicto, pero realmente la parte más estratégica o la parte más operacional nos afecta muy poco. Nosotros impartimos instrucción muy básica, aunque es cierto que los profesionales que vienen con ellos nos transmiten las últimas técnicas y tácticas que están empleando en el conflicto, tanto ellos como sus enemigos, y realmente los incorporamos a nuestra formación. Hay una cierta retroalimentación en esas lecciones aprendidas en la contienda.

P. Cambiando de tema, el 2024 será un año para recordar en el Regimiento Farnesio que ha cumplido 375 años.
R. Es un Regimiento absolutamente especial y es un año muy especial para nosotros. El Regimiento ha cumplido 375 años, es el Regimiento de Caballería en activo más antiguo del mundo y lo estamos celebrando de la mejor forma que los militares sabemos hacerlo: hemos desplegado en Toledo, en la Operación EUMAM; tenemos militares en las inundaciones de Valencia y tenemos otro escuadrón que está ultimando su preparación para desplegar en unas pocas semanas en Eslovaquia. El Regimiento Farnesio puede decir que el cien por cien de sus capacidades está empeñado en operaciones reales. Es la mejor forma de celebrar nuestro aniversario y de mirar con optimismo al futuro.

Es una experiencia militar, pero también humana

P. Hablaba de Valencia. ¿Qué se han encontrado sus hombres allí? ¿Cómo ha sido su trabajo?
R. En Valencia ha trabajado un escuadrón apoyando las labores de desescombro junto a la UME y lo que me transmite el capitán que manda este escuadrón es que se han encontrado mucho trabajo, con limpieza de calles, búsqueda de desaparecidos, desescombre de edificios. Me cuentan también el cariño del pueblo valenciano con el que hemos sido tratados. Todos mis hombres fueron voluntarios y eso es para mí un verdadero honor.

P. ¿Cómo se estructura el Regimiento Farnesio?
R. Es un Regimiento de Caballería que se compone de una plana mayor que asiste al Coronel Jefe y un Grupo de Caballería, que es la unidad de combate que dispone el Regimiento y que tengo el honor de mandar. Somos el grupo de exploración y la unidad de reconocimiento de nuestra brigada. Somos sus ojos y sus oídos, los primeros que desplegamos y los últimos que nos vamos, proporcionamos seguridad y reconocimiento a todo el grueso de la Brigada. Ese es el Regimiento Farnesio, la punta de lanza de la BRILAT.

P. Cree que la labor que realiza el Regimiento Farnesio nº 12 cala en Valladolid?
R. El Regimiento Farnesio está indisolublemente unido a la ciudad de Valladolid desde hace muchísimos años. Valladolid tiene un cariño especial al Regimiento y lo pudimos ver, por ejemplo, en el acto central de la celebración del 375 aniversario desfilando en la Acera de Recoletos y cómo el pueblo vallisoletano se volcó con el Regimiento. Valladolid es nuestra casa y nos proporciona identidad, cariño y fuerza. Nuestros soldados son Valladolid.

P. ¿Cómo es el futuro a corto plazo?
R. Tenemos muchos retos por delante. El próximo año, sin ir más lejos, el Regimiento Farnesio va a liderar un contingente en Eslovaquia y desplegará allí al mando de nuestro Coronel. Formaremos parte del despliegue preventivo que ha materializado la OTAN de cara al flanco Eeste en el conflicto de Ucrania. Allí formaremos una formación táctica de seis meses participando en esa operación con aproximadamente 700 hombres.